La mayoría de las personas que terminan desarrollando diabetes tipo II son obesas o con sobrepeso en el momento del diagnóstico, ya que la grasa dificulta el uso de la insulina por parte de las células del organismo.

La diabetes es un trastorno caracterizado por que el organismo no es capaz de producir insulina o de utilizarla de manera adecuada. El paciente se encuentra en un estado de hiperglucemia constante que a la larga provocará daños irreversibles en riñones, ojos, nervios, corazón y vasos sanguíneos.

Actualmente más de 422 millones de adultos padecen diabetes, y las cifras van en aumento. Puesto que es una enfermedad en pleno auge, la prevención a través de un abordaje nutricional es el punto clave para el control de los valores de glucemia, así como una disminución del peso corporal mediante un control médico- nutricional.

En concreto, las dietas con un predominio vegetal, como es la Dieta Mediterránea, son efectivas en pacientes diabéticos. Los vegetales crucíferos (brócoli, coliflor, romanesco…) y los de hoja verde (espinaca, canónigos, grelos…), así como las frutas, son eficaces en la reducción del riesgo de la enfermedad. La proteína vegetal y la de los lácteos ayudan en el control glucémico, al igual que lo hacen las grasas de origen vegetal.

Como os explicamos siempre en consulta, además de la dieta, es necesaria la práctica de ejercicio físico diario. El ejercicio nos permite un mejor control de la glucemia gracias a un aumento de la sensibilidad a la insulina, lo que provocará también una bajada de los requerimientos de la misma.

En endObesidad te ayudamos a través de nuestro método para que aprendas a crear hábitos saludables para un mejor control metabólico y reducir así las probabilidades de desarrollar ésta enfermedad. Además, también realizamos la cirugía metabólica, que consiste en una técnica vía laparoscopia tras la cual el paciente “deja de ser diabético” gracias a la alteración en la secreción de hormonas intestinales.

¡Toma las riendas y comienza a cuidarte ya!